domingo, 8 de enero de 2012
No ceso de hablar
No ceso de hablar de la tenue diferencia entre las mujeres y los árboles,
De la magia de la tierra,
de un país cuyo sello no he visto en ningún pasaporte.
Pregunto: señoras y señores de buena voluntad,
¿la tierra de los hombres es para todos los hombres como afirmáis?
Entonces ¿dónde está mi choza, dónde estoy yo?
La asamblea me aplaude.
Otros tres minutos, tres minutos de libertad y reconocimiento… la asamblea
acaba de aprobar nuestro derecho a volver, como todos los pollos,
como todos los caballos, a un sueño de piedra.
Les estrecho la mano, uno por uno, luego les hago una reverencia…
y prosigo este viaje hacia otro país
donde hablo sobre la diferencia entre espejismo y lluvia
y pregunto: señoras y señores de buena voluntad,
¿la tierra de los hombres es para todos los hombres?
Mahmud Darwish (Trad. María Luisa Prieto)
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario