viernes, 9 de noviembre de 2012
Dicen que el alma no existe
Dicen que el alma no existe
pero cuando veo las marcas
que has dejado en la mía
sé que existe:
las colillas de cigarrillos, los círculos que dejó el vaso
los papeles arrugados
las casi borradas marcas de sellos
y las manchas de tinta
hacen visible hasta lo más irreal
al fantasma más transparente.
-Como en una oficina
en la que alguien se ha colado
en mitad de la noche
para redactar un alegato contra Dios
a la luz del anuncio de neón de fuera.
Henrik Nordbrandt
La ciudad de los constructores de violines. Vaso roto Poesía.
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